Cuidemos lo más importante: la vida y la salud.
El colágeno es una proteína esencial en el cuerpo humano, conocida por su papel en la salud de la piel, las articulaciones y los huesos. Sin embargo, en el contexto de los pacientes oncológicos, el colágeno puede aportar beneficios adicionales, como son:
- Apoya la reparación de tejidos: El tratamiento oncológico a menudo causa daño a los tejidos, el colágeno es esencial para la reparación y regeneración de estos.
- Fortalece la inmunidad: El colágeno es un componente esencial del sistema inmunológico, lo que puede ser especialmente beneficioso en pacientes con cáncer que experimentan una supresión del sistema inmunológico.
- Alivia los efectos secundarios: Muchos pacientes oncológicos experimentan efectos secundarios como mucositis, sequedad en la piel y debilidad en las uñas, síntomas que pueden mejorar con la suplementación de colágeno.
Beneficios del Magnesio en pacientes oncológicos
El magnesio es un mineral crucial para el funcionamiento del cuerpo y su importancia en pacientes con cáncer no puede subestimarse. Sepamos bien en qué ayuda consumirlo:
- Reduce la fatiga: Los pacientes oncológicos a menudo luchan contra la fatiga y el magnesio desempeña un papel clave en la producción de energía celular, lo que puede ayudar a combatir la fatiga.
- Apoya al sistema cardiovascular: Algunos tratamientos contra el cáncer pueden aumentar el riesgo de problemas cardiovasculares, el magnesio es esencial para mantener un corazón saludable.
- Mejora la calidad de vida: La suplementación con magnesio puede ayudar a reducir los síntomas de la ansiedad y la depresión, lo que puede mejorar la calidad de vida de los pacientes oncológicos.
¿Cómo incorporar Colágeno y Magnesio en la dieta?
Es importante destacar que antes de incorporar cualquier suplemento en la dieta de un paciente oncológico, se debe consultar a un profesional de la salud. Sin embargo, en general, se pueden encontrar estas sustancias en alimentos como:
- Colágeno: Carnes magras, pescado, caldos de huesos, huevos, frutas cítricas y verduras de hojas verdes.
- Magnesio: Almendras, espinacas, aguacates, plátanos, semillas de calabaza y granos enteros.
Nutricionista y dietista Pierina Papadopulos CNP 8043