Para sentirte bien en cada etapa

Con la llegada del Día de la Madre, todos pensamos en cómo sorprenderla, en cómo agradecerle todo lo que hace (y ha hecho) por nosotros. Este año, ¿por qué no regalarle algo que vaya más allá de lo material?
Hablemos de salud y bienestar. Especialmente del cuidado del corazón… porque no hay corazón más generoso que el de una madre.

En Ana María Lajusticia sabemos que la base de una buena salud está en la alimentación y el estilo de vida. Y cuando se trata de cuidar el sistema cardiovascular, la prevención y los buenos hábitos marcan la diferencia.

¿Sabías que no todas las grasas son malas?

Existe el mito de que todas las grasas son perjudiciales. Pero en realidad, algunas son esenciales para el buen funcionamiento del organismo. Protegen órganos vitales, aportan energía y son necesarias para funciones clave como la producción de hormonas o la absorción de vitaminas.

Entre estas grasas beneficiosas, hay un complemento natural que merece un papel importante, sobre todo cuando pensamos en la salud cardiovascular: la lecitina de soja.

¿Qué puede hacer la lecitina de soja por mamá?

La lecitina de soja es un fosfolípido que ayuda a emulsionar las grasas, facilitando su digestión y evitando que se acumulen en las paredes de las arterias. Este proceso no solo ayuda a mantener niveles saludables de colesterol, sino que también favorece la flexibilidad arterial, reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Pero eso no es todo. La lecitina también aporta colina y fósforo, nutrientes esenciales para el cerebro y la memoria. Por eso, es ideal para madres activas, trabajadoras, quienes enfrentan un gran desgaste físico y emocional día a día.

Regalar salud es regalar amor

Regalar salud es regalar vida. Y si bien un perfume o una cena pueden ser un detalle bonito, cuidar su corazón es un acto de amor que perdura en el tiempo.

Jana Prötzel – Nutrición y Dietética CNP 10487